🐡 Los devoradores de basura que han limpiado un río
“Mr. Trash Wheel” (El señor Rueda de basura), y “Professor Trash Wheel” (La profesora Rueda de basura) parecen personajes de un programa para niños, pero en realidad son recolectores de basura propulsados con energía solar e hidroeléctrica que limpian el puerto interior de Baltimore, Estados Unidos. Tan lindos como efectivos, “Mr. Trash Wheel” quien posee incluso su propia cuenta de twitter y “Profesor Trash Wheel” tienen ojos grandes y saltones parecidos a un caracol, y la capacidad de aspirar bolsas plásticas, contenedores de espuma de poliestireno, y otros desechos.
Estas innovadoras ruedas, utilizadas por un grupo conservacionista en colaboración con la Asociación de Aguas de Baltimore, combinan tecnología antigua y nueva para aprovechar el poder del agua y la luz solar con el objetivo de recoger la basura y los desechos que flotan por el río Jones Falls.
La corriente del río proporciona energía para dar vuelta la rueda que está equipada con una cinta transportadora; A medida que la rueda gira, la basura y otros desechos que flotan en el agua se desplazan por la cinta que los levanta y los deposita en una barcaza.
Cuando no hay suficiente corriente de agua, una matriz de paneles solares proporciona energía adicional para mantener la máquina en funcionamiento. Cuando el contenedor está lleno, es remolcado por el barco, y un nuevo contenedor de basura se repone en su lugar. ¡Voilà!
“Mr. Trash Wheel” ha recogido más de un 500.000 kilogramos de basura del Jones Fall River desde que se puso en marcha en 2014, llenando un promedio de 70-100 contenedores de basura cada año: 300.000 bolsas de plástico, 6.000 botellas de vidrio y 9 millones colillas de cigarrillos, así como desechos más exóticos que incluyen un pitón viva, componen los desechos que se retiran de la vía fluvial. La basura se quema para generar electricidad con planes para aumentar las capacidades de reciclaje en el futuro.
Esta notable fotografía muestra la dimensión del impacto que la rueda de agua ya ha tenido en su corta vida. La foto de la izquierda fue tomada el 30 de abril de 2014, después de un torrencial aguacero que arrastró una cantidad desgarradora de basura al puerto. Un poco más de un año después, una tormenta similar no tuvo impacto en el puerto.
