😲 ¿Imaginabas que Venezuela limita con Francia y Holanda?
La Isla de Aves ha sido objeto de controversia a lo largo de décadas, e incluso siglos. Consecuencia de esta historia agitada, algunas particularidades la hacen especial en el plano geopolítico y económico del Caribe, y de las que se derivan inusuales curiosidades.
Está situada al sureste de Puerto Rico, al sur de las Islas Vírgenes de Estados Unidos, al suroeste de Montserrat y al oeste de Dominica y Guadalupe. Es precisamente la isla de Montserrat, territorio británico de ultramar, la que se encuentra más cercana, a unos 185 kilómetros. La república isleña de Dominica está a tan solo 225 km y la separan 547 kilómetros de la Venezuela continental. Por esta razón Dominica la reclamó como propia durante muchas décadas.
Su primera singularidad es su tamaño, que ha ido menguando a lo largo de los últimos siglos hasta perder más de 70 por ciento de su superficie, debido a la acción del mar, la erosión y los huracanes. Tiene apenas 375 metros de longitud por 50 de ancho, y se eleva apenas 4 metros sobre el nivel del mar. Estas características la englobarían en la categoría de rocas o islote, según la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho al Mar. De hecho, su superficie de arena y la escasa vegetación suelen quedar a menudo sumergidas bajo las aguas durante los temporales.
Sin embargo Venezuela la considera oficialmente como una isla, gracias a lo cual la zona económica exclusiva de Isla de Aves se extiende hasta las 200 millas náuticas (320 kilómetros) en lugar de tan solo 12 millas.
La historia de la isla está plagada de reclamaciones e intentos de apropiación desde que fuera descubierta para España por Avaro Sanzze en 1584. Ingleses, portugueses, holandeses, e incluso norteamericanos protagonizaron intentos de anexión, atraídos principalmente por la abundancia de guano. Sin embargo la isla nunca tuvo un asentamiento permanente.
En 1865 las disputas se resolvieron finalmente entre el gobierno venezolano y el de la isla holandesa de Curazao. Para ello se acudió de común acuerdo a la reina Isabel II de España, quien tras estudiar las alegaciones de ambos falló a favor de Venezuela, pero con la condición de que permitiese la pesca a los habitantes de San Eustaquio, Saba y Sint Maarten (la parte holandesa de la isla de San Martín, compartida con Francia).
Para que no quedaran dudas, en junio de 1978, Venezuela construyó una base científica cuya plataforma se asienta principalmente sobre el agua, elevada sobre la arena para evitar inundaciones. La edificación está habitada por una misión científica y militar, y precisamente es la que garantiza la consideración de isla. Al reforzar el estatus de “isla”, Venezuela obtiene las 200 millas de zona económica exclusiva, un extenso territorio en el Caribe. También produce una curiosidad geográfica, que Venezuela tenga fronteras marítimas con los Estados Unidos, y las naciones europeas de Francia y el Reino de los Países Bajos.
En el caso de Estados Unidos, la frontera quedó establecida mediante el acuerdo del 28 de marzo de 1978 entre ambos países, discurriendo entre los territorios norteamericanos de Puerto Rico y las Islas Vírgenes de los Estados Unidos, y la propia Isla de Aves. Ésta es precisamente el territorio venezolano más cercano a los Estados Unidos, ya que la estadounidense isla de Saint Croix está a solo 260 kilómetros.
Ese mismo año se pactaron con Holanda las fronteras entre Venezuela y las islas de Saba y San Eustaquio. El acuerdo con Francia llegó el 17 de junio de 1980, demarcando las fronteras entre Aves y las francesas Guadalupe y Martinica.
Pese a todo, en 2001 Dominica efectuó una reclamación sobre Isla de Aves, a la que consideraba como parte de su territorio, pero para 2006 aceptaron finalmente el estatus reconocido internacionalmente.