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IKEA, el minorista de muebles más grande del mundo, planea utilizar sólo materiales renovables y reciclados en sus productos para el año 2030, en un esfuerzo por cumplir con los objetivos científicos para ayudar a limitar el calentamiento global al nivel prescrito en el Acuerdo Climático de París y reducir su impacto en el medioambiente.

Inter IKEA, el propietario de la marca más conocida por sus muebles en caja para armar en casa y de bajo costo, sostiene que su objetivo es reducir el impacto climático de cada uno de sus productos en más de dos tercios a fines de la próxima década.

“El propósito de esta estrategia es inspirar, activar y guiarnos en la toma de decisiones y el establecimiento de objetivos para que juntos podamos lograr los grandes cambios positivos que queremos ver en el mundo y para todo el ecosistema de IKEA“, manifestó en un comunicado en su sitio web el gigante escandinavo del mobiliario.

Actualmente, el 60% de la gama IKEA se basa en materiales renovables, mientras que casi el 10% contiene materiales reciclados, dijo una portavoz de Inter IKEA.

Inter IKEA se une a una creciente lista de compañías globales que se esfuerzan por hacer que sus operaciones sean más sostenibles desde el punto de vista ambiental, aunque hay dudas sobre si realizan suficientes acciones en esta dirección y si deberían estar haciendo más.

“A través de nuestro tamaño y alcance tenemos la oportunidad de inspirar y capacitar a más de mil millones de personas para vivir vidas mejores, dentro de los límites del planeta”, dijo Torbjorn, CEO de Inter IKEA, en un comunicado para acompañar el documento de estrategia de sostenibilidad 2030 de la compañía.

Las 250 mayores compañías cotizadas del mundo representan un tercio de todas las emisiones de gases de efecto invernadero creadas por el hombre, pero pocas tienen objetivos concretos para limitar el aumento de las temperaturas, concluyó en octubre un informe técnico de Thomson Reuters Financial & Risk.

Las materias primas representan la mayoría de las emisiones de gases de efecto invernadero de IKEA y, junto con la ampliación de la vida útil potencial de sus productos, es donde IKEA ve las mayores oportunidades para reducir su impacto sobre el medioambiente.

“Parte de nuestro compromiso no sólo será eliminar los plásticos de un sólo uso sino también diseñar todos los productos IKEA con nuevos principios circulares”, manifiesta Torbjorn.

Además de eliminar el plástico no reciclable, la empresa implementará cambios que van desde pegamento más ecológico, pasando por más comida vegetariana en sus restaurantes y hasta una nueva receta para velas.

Inter IKEA proyectó para el Grupo IKEA la reducción del impacto climático de las tiendas y otras operaciones en un 80% en términos absolutos para 2030 en comparación con 2016.

“Nos comprometemos a tomar la iniciativa, trabajando en conjunto con todos, desde proveedores de materias primas hasta nuestros clientes y socios”, agrega Torbjorn.

Las marcas globales como H & M, Coca-Cola y Sony también se han comprometido con objetivos basados ​​en la ciencia, cuyo fin es ayudar a limitar el calentamiento global a menos de 2ºC, la meta establecida en el Acuerdo de París 2015.

Inter IKEA también dijo que eliminaría todos los productos de plástico de un sólo uso de su gama y los restaurantes en la tienda para 2020, y que IKEA Group lanzaría la venta de soluciones solares para el hogar a 29 mercados para el año 2025.

La Iniciativa de Metas Basadas en la Ciencia es una colaboración entre el Carbon Disclosure Project, el World Resources Institute, el World Wide Fund for Nature y el Pacto Mundial de las Naciones Unidas.
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