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Arles ha marcado un camino siguiendo los pasos de Vincent van Gogh para localizar y recorrer los inspiradores escenarios elegidos por el maravilloso artista, en los que ha colocado su caballete para eternizar la belleza cotidiana.

Vincent Van Gogh llega a Arles un día de febrero de 1888. Comienza entonces un período de trabajo intenso y apasionado bajo la vibrante luz del Mediodía francés. Su estancia en el pueblo es en la vida del pintor la época más productiva, en la que realiza unos 300 dibujos y pinturas durante un espacio de 15 meses, que forman uno de los capítulos más deslumbrantes de la historia del arte.

Cansado de la agitada vida de las ciudades y del duro clima en el norte, el pintor holandés se dirige al sur para vivir en latitudes más cálidas, y especialmente para encontrar la luz y los colores de la Provenza que le permitirán seguir perfeccionando su nueva técnica. Su hermano Theo refirió que tenía la intención de “ir primero a Arles, sólo para emprender su camino, luego continuar a Marsella”.

Todo lo que ve lo inspira y se convierte en un lienzo.

La Casa amarilla / La Maison jaune

Van Gogh llegó en tren el 20 de febrero de 1888. Tenía entonces 34 años. El pintor viene a buscar la luz, los colores y evoluciona su técnica. Según Anne Gastinel, una guía de la Oficina de Turismo de Arles, quería ir a Marsella y tomar un barco a África. Pero el tren se encontraba bloqueado por la nieve. Decide entonces quedarse en Arles. Primero se aloja en una pensión antes de alquilar la casa amarilla, donde quiere crear un taller de artistas de vanguardia. Hará una pintura muy famosa. Este edificio, bombardeado en 1944, ya no existe hoy. Frente a la reproducción de esta pintura, instalada en el mismo lugar donde el pintor dejó su caballete.

“Era el lugar ideal. Al salir de la casa, le bastaba caminar 200 metros para encontrarse en medio de los campos,  y descubre este campo arlesiano que le fascina”, explica Gastinel.

El puente Langlois / Le pont Langlois

Los canales, puentes levadizos, molinos de viento, casitas de paja y extensos campos de la campiña de Arles le recordaron a Van Gogh su vida en los Países Bajos. Arles le trajo el consuelo y el sol brillante que buscaba para sí mismo y las condiciones para explorar la pintura con colores más vivos, contrastes de colores intensos y variadas pinceladas. También regresó a las raíces de su formación artística de los Países Bajos, sobre todo con el uso de una pluma de caña para sus dibujos. El puente reconstruido de Langlois ahora se llama Pont Van-Gogh.


Entrada del Jardín públic / Entrée du Jardin public

Seducido por la región, el artista holandés camina la región a pie durante horas, deslumbrado por la diversidad de paisajes. Durante el verano, pinta muchas escenas de la cosecha y busca pintar en el lugar, estar cerca de personas sencillas que trabajan en la tierra y lograr así otra mirada de la naturaleza, el cielo y la tierra que nos alimenta.


La noche estrellada / La nuit étoilée

La pintura de noche intrigaba a Van Gogh. La noche y sus efectos de luz le han proporcionado un tema para muchas de sus pinturas más famosas. En los muelles coloca su caballete cuando el viento lo permite. Arles y el Ródano una historia de amor que depende del estado de ánimo de las aguas.


El viejo molino / Le vieux moulin

Cuando el 12 de septiembre de 1888, Vincent escribió a su hermano Theo: “Tengo un estudio de un antiguo molino pintado con tonos rotos”… se refería a la pintura que representa uno de los molinos que aún sobrevivían en el siglo XIX en el barrio de Mouleyrès.
Este molino no tenía más aspas en 1888 y probablemente se había transformado. El edificio en la calle Mireille, aunque muy modificado, todavía se parece a él. El paisaje revela parte del pequeño patio que el pintor ya había representado en sus pinturas de junio con motivo de la cosecha.


Terraza del café de noche / Terrasse du café le soir

En esta pintura, Van Gogh expresó sus nuevas impresiones del sur de Francia. Van Gogh mismo lo escribe en una carta a su hermana Wilhelmina:

“… Aquí hay una pintura nocturna sin negro, sólo un bonito azul, púrpura, verde y en este ambiente el lugar iluminado está coloreado con azufre pálido, cal. Me divierte mucho pintar la noche en el lugar. En el pasado, el cuadro se dibujaba y pintaba el día después del dibujo. Pero estoy feliz de pintar la cosa de inmediato. Es cierto que en la oscuridad puedo tomar un azul por un verde, una lila azul para un lila rosa, ya que no distinguimos bien la calidad del tono. Pero esta es la única forma de salir de la noche oscura convencional con una luz pálida y blanquecina, mientras que una simple vela ya nos da el amarillo, los anaranjados más ricos. ”


Jardín de la Casa de reposo / Le Jardin de la Maison de santé

En mayo de 1889 Van Gogh deja Arles para retirarse en el Asilo de Saint-Rémy-de-Provence dejando para siempre ligado su nombre al de Arles.

¡Arles es un verdadero museo a cielo abierto, donde encontrarás los paisajes y lugares que inspiraron al artista! Para compartir la emoción y la inspiración del pintor, la Oficina de Turismo te presenta una aplicación móvil gratuita.

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