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El universo ha escuchado tu súplica… ¡Las bibliotecas de playa son ahora una realidad! ¿No es una de las peores cosas que te puede ocurrir en vacaciones cuando te olvidas de empacar tu libro favorito? Unas buenas vacaciones en la playa no son lo mismo sin un libro que puedas leer mientras te recuestas al sol en la cálida arena.

Como si el universo escuchara nuestro anhelo, numerosas playas de todo el mundo están abriendo sus propias bibliotecas para estimular el placer de la lectura y para mimar a todos los amantes de la literatura que frecuentan las costas y playas en sus vacaciones.

El objetivo implica también facilitar y democratizar el acceso a la lectura y para el deleite de los veraneantes, que entre tomar sol y nadar con frecuencia se aburren un poco.

Una excelente e inspiradora iniciativa digna de replicar en cada playa. Si te gustó la propuesta, ¡tú mismo puedes ser el artífice de una motivadora biblioteca en tu propia playa!

Albena, Bulgaria

A orillas del Mar Negro, el balneario de Albena, considerado el más grande del país con 200,000 visitantes al año, también alberga una biblioteca de playa. Resistente al sol, el viento, la lluvia y todo lo que pueda dañar nuestros queridos libros, esta estantería curva alberga más de 6.000 libros en 15 idiomas diferentes.

Esta completa biblioteca de playa opera con un sistema en el que puedes tomar prestado un libro durante toda la duración de tus vacaciones y devolverlo al final. De hecho, ¡también puedes dejar los tuyos para que el siguiente visitante pueda disfrutarlos!

Bournemouth, Reino Unido

En el 400 aniversario de la muerte de Shakespeare, Vodafone y la Biblioteca Británica han puesto a disposición de todos las ediciones más antiguas e inéditas de las obras de Shakespeare, lo que permitió a las personas descargar las obras más populares del autor desde un fondo de pantalla especialmente diseñado con bibliotecas virtuales.
La Biblioteca digital emergente ubicada en Bournemouth, una playa en la costa sur de Inglaterra, brindó un nuevo acceso a copias digitales gratuitas al permitir a las personas escanear simplemente los códigos QR impresos en los libros virtuales.

Bondi Beach, Australia

En Bondi Beach, Sidney, la compañía sueca de muebles IKEA instaló estanterías con libros y los visitantes fueron invitados a intercambiar ejemplares, a tomar un libro, o a realizar una donación. El proyecto fue llevado a cabo por la Fundación de Alfabetización y Aritmética de Australia.

Jumeirah, Dubai

Dubai inauguró su primera biblioteca playera en las costas de Jumeirah para permitir a los bañistas relajarse con un libro mientras toman sol con una excelente vista a Burj Al Arab. Los residentes y turistas dieron la bienvenida a la idea y algunos de hecho donaron sus ejemplares para compartir.
La biblioteca opera con energía solar y sistemas de auto iluminación para conservar recursos.

Campania, Italia

Algunos veranos atrás, ha comenzado tímidamente una de las iniciativas literarias más interesantes de los últimos años, promovida por Legambiente. En ese momento, el proyecto involucraba sólo 6 playas en Campania, pero en los años siguientes se ha extendido como un reguero de pólvora y ahora hay muy pocos sitios marítimos que aún no lo hayan aplicado. Cualquiera puede recoger un libro de forma gratuita, y leerlo cómodamente recostado al sol. Al final del día, el volumen debe ser estrictamente devuelto.

En las áreas que se adhieren al proyecto, “Libreria da spiaggia” (Biblioteca de playa), organiza muchas otras iniciativas que tienen un sólo objetivo: difundir el placer de la lectura. Nuevos textos, reuniones con autores y lecturas animadas para niños se presentan continuamente. La logística operacional se gestiona con la ayuda de voluntarios, y las librerías y los turistas pueden ofrecer libros de forma gratuita.

El Jadida, Marruecos

La playa de Deauville en El Jadida, acoge una de las ediciones de “Biblio-Plage” (Biblio playa). Una biblioteca con los pies en la arena, para todos los gustos y para todas las edades en la se han puesto 1.500 libros a disposición de los veraneantes.

No es necesario ir a la biblioteca antes de ir a la playa, son los libros los que se mueven. El sistema de préstamos suele ser informal, basado en la confianza y gratuidad.

Etretat, Francia

El famoso balneario Etretat en Normandía, ha sido pionero en la idea de leer con los pies en la arena. Desde 2006, el departamento de Seine-Maritime, Francia, instala sus bibliotecas de verano en 12 playas. Un total de 12 cabañas, 12,000 libros, 400 hamacas, 36 sombrillas y 36 animadores están disponibles para el público.

La idea ha sido emulada en otras partes del país. Ahora hay bibliotecas de playa en Aquitania y Bretaña. En Marsella, la asociación Emaús, una organización que lucha contra la miseria fundada por el abate Pierre, ha estado ofreciendo bibliotecas temporarias de autoservicio en la playa durante los últimos cinco años.

Port-Maria, Francia

Durante tres años, la biblioteca de medios se trasladó a la playa de Port-Maria en el período estival. Esta biblio-playa, abierta a todos y gratuita, te ofrece instalaciones confortables para leer cómodamente en sillas frente al mar.

“Los chicos de la playa pueden encontrar una amplia selección de libros alojados en una biblioteca de 12 metros cuadrados situada en la arena”, dice Marie-Pierre Briant, director de la biblioteca. Novelas, thrillers, cómics, y una colección de más de 800 títulos, para niños y adultos.

Tadoussac, Canadá

Una adorable iniciativa personal, siguiendo la política de bibliotecas de playa accesibles a todo el público abrió sus estanterías en Québec, en la hermosa playa de Tadoussac. La instalación no es tan vistosa ¡pero le sobra corazón!

L’Hérault, Francia

“Lire à la mer” (Leer en el mar), es un proyecto de bibliotecas de temporada. Una gran iniciativa llevada a cabo en las playas de l’Hérault sobre el Mar Mediterráneo.

2.000 libros disponibles para los bañistas debajo de cabañas de paja sombreadas constituyen una biblioteca ecléctica donde todos encuentran lo que desean. Cómics, novelas, revistas, periódicos e incluso algunas obras maestras de la literatura disponibles en los estantes durante la temporada de verano.

Metzitzim, Israel

El municipio de Tel Aviv inauguró una nueva biblioteca sobre la arena en la playa de Metzitzim con el objetivo de ofrecer a los turistas la opción de retirar libros de forma gratuita.

Long Beach, Estados Unidos

La Biblioteca Pública de Long Beach en New York, pone en marcha pequeñas y adorables estaciones de biblioteca al aire libre en el paseo marítimo cerca de los balnearios de Grand, Magnolia, Monroe, y Franklin.

Si te gustó la propuesta, ¡tú mismo puedes ser el artífice de una motivadora biblioteca en tu propia playa!

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