🌱Este supermercado cultiva vegetales en su propio techo vivo

Una huerta de más de 2,300 metros cuadrados regada con agua del sistema de deshumidificación de la tienda. En Montréal, la ecología urbana ¡sube a la azotea de los supermercados!

Unos pocos metros son suficientes para que las verduras pasen del campo al puesto del supermercado canadiense IGA Duchemin. La tienda de comestibles Saint-Laurent se convierte en la primera en Canadá en vender productos que crecen en su techo. Los Laurentianos presumen de la mayor cantidad de comida local posible, sólo transportadas por las escaleras.

La huerta orgánica más grande en un techo verde en el país produce alrededor de treinta variedades de frutas y verduras orgánicas certificadas: lechuga, tomates, finas hierbas, morrones, berenjenas y más.

“La idea surgió de una solicitud del barrio que requería un techo verde del 50%. Vimos esto como una oportunidad y no como una limitación y decidimos ir más lejos con la construcción de nuestra nueva ubicación”, dice el copropietario Richard Duchemin.

Para llevar a cabo este proyecto a gran escala, el comerciante se asoció con los productores de La ligne verte, que se especializa en techos vivos. Ya tienen experiencia en agricultura urbana con el Palais des Congrès y Santropol Roulant.

“Estamos alcanzando un punto cúlmine para nuestra empresa con el gran tamaño de este techo y sus peculiaridades, como el riego a través de la recuperación de agua del sistema de deshumidificación de la tienda”, dijo el presidente de La ligne verte, Antoine Trottier.

El techo verde tiene un suelo de solo 15 cm de espesor, por lo que fertilizar el suelo ha sido un desafío. Un agrónomo desarrolló un plan adecuado para las condiciones, donde también tuvo en cuenta el viento y el calor, más intenso en un techo.

“Estoy gratamente sorprendido por todo lo que se ha producido. Al seguir el modelo orgánico intensivo, logramos hacer dos o tres cultivos en el mismo terreno durante la temporada”, dice el gerente de proyectos y jardinero de mercado Tim Murphy.

El calor hace posible comenzar la temporada más temprano, tan pronto como la nieve se derrite. Un túnel permite continuar el cultivo en invernadero en el otoño. Tim Murphy tiene como objetivo hasta nueve meses de producción por año.

Se requiere ingenio para cultivar en un techo. Dado que los tutores no pueden mantenerse en el suelo, los trabajadores de la panadería han reservado cubos de plástico en los que se ha vertido cemento para fijar las estacas.

“Tenemos una bella sinergia con la tienda, y mucha experiencia también. El carnicero afila nuestros cuchillos, por ejemplo”, agrega Murphy.

Entre las muchas variedades de vegetales cultivados, hay alrededor de diez tipos de tomates como el Indigo Rose, que toma un tono negro a rosado dependiendo de su madurez.

“También somos conscientes de que servimos a una comunidad multicultural y probamos varios productos, como el bok choy y el brócoli”, dice el jardinero del mercado.

Aún al comienzo, a veces se requiere que los voluntarios ayuden a mantener el jardín, pero La ligne verte desea que el plan de negocios sea sostenible con dos empleados.

La producción de compost también evita comprar al principio de la temporada. El jardinero del mercado también desea agregar el cultivo de flores, además de los que ya se utilizan para proteger las verduras de ciertos insectos.

Los jardineros del mercado prefieren los métodos ecológicos para controlar las malas hierbas y los insectos, especialmente con redes. Los bioplaguicidas se utilizan únicamente como último recurso.

En el techo también hay colmenas gestionadas por la empresa Alvéole que permiten la venta de cerca de 200 kg de miel a finales de septiembre en el supermercado. Richard Duchemin lo llama la “miel de sus flores” para sus clientes.