Aunque vivimos en un mundo conectado, con acceso a tanto conocimiento con sólo hacer clic en un botón, todavía hay algo mágico e importante sobre los libros. La capacidad de sumergirse en la ficción literaria y leer lenta y profundamente, en oposición a la tentación de leer y desplazarse, es rica en recompensas y ayuda a fomentar habilidades importantes como el pensamiento crítico y la empatía, dos cosas que cada vez son más evidentes en nuestra sociedad.
En Coeur d’Alene, Idaho, Sharalee Armitage Howard, bibliotecaria, artista y ex encuadernadora, decidió que el gran tocón de un álamo seco de 110 años de edad, en lugar de ser retirado y destruido, sería el escenario perfecto para una ‘Biblioteca de Little Tree’.
El tocón fue tallado desde el interior, cubierto con un techo e instalado con una acogedora iluminación interior y exterior que la hace lucir verdaderamente como de un cuento de hadas.
La organización sin fines de lucro Little Free Library está ayudando a garantizar que mantengamos vivo nuestro amor innato por los libros al “inspirar un amor por la lectura, construir una comunidad y generar creatividad al fomentar el intercambio de libros en el vecindario en todo el mundo”. ¡Estas pequeñas bibliotecas están apareciendo en todas partes, con más de 75,000 bibliotecas proporcionadas en 88 países hasta ahora!
Fuente: Bored Panda
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